Pereña de la Ribera se prepara para la festividad de la ‘Virgen Chica’
¡Agarraros los sombreros y preparen los zapatos de baile porque las fiestas de Pereña de la Ribera están a punto de comenzar! Este encantador pueblo a orillas del río Duero se está preparando para celebrar sus festividades de la «Virgen chica», y este año prometen ser más emocionantes que nunca.
El fin de semana del 11 y 12 de mayo será el preludio de la gran celebración que tendrá lugar el martes 14 de mayo. ¿Estás listo para unirte a la diversión?
El sábado 11 de mayo, a las 23:00 horas, la diversión comenzará con una verbena en el Juego de Pelota, donde la orquesta ANGELUS pondrá el ritmo a la noche. Prepara tus mejores movimientos y tus canciones favoritas, porque esta será una noche para recordar.
El domingo 12 de mayo, la tradición religiosa será el foco principal con una misa en la Ermita a las 12:30 horas. Es el momento perfecto para reunirse con la comunidad y reflexionar en este hermoso entorno.
Pero el plato fuerte llega el martes 14 de mayo, ¡así que asegúrate de tener el estómago preparado! A las 12:00 horas, se celebrará una misa en la Ermita, seguida de un convite ofrecido por los mayordomos del pueblo. ¡Una oportunidad perfecta para disfrutar de la compañía y compartir algunas risas!
Y después de la misa, prepárate para una deliciosa paella popular a las 14:30 horas. Pero no te preocupes por el hambre, ¡porque se han puesto a la venta tickets anticipados por solo 3 Euros en la panadería y tienda de Flori! También podrás adquirirlos el mismo día 14 en el Teso, así que no hay excusa para no unirse a la fiesta.
Cuenta la historia entre chismes y relatos que allá por los inicios del siglo VIII, los árabes pusieron patas arriba lo que solía ser el pueblito de Pereña. La cosa pasaba en el Berrocal, en un sitio llamado Teso de la Ermita de la Virgen del Castillo, donde se plantaba un castillo que terminó hecho ruinas. Resulta que esos escombros escondían una imagen muy querida por la gente del lugar, Nuestra Señora de los Ángeles, una figurilla chiquitita tallada en piedra que desapareció por un tiempo largo hasta la mitad del siglo XIV.
Entonces, salió a flote la historia de que la Virgen le había hecho una visita a un pastor, contándole dónde estaba escondida. A partir de ahí, la devoción de este pueblo hacia su Virgen se volvió cosa de toda La Ribera, y hasta cruzó el Duero para llegar a partes de La Sierra. Ocurrió en un 14 de mayo de 1721, cuando apareció en su peana la Virgen ‘chica’, una miniatura que se parecía a la original y que se ganó fama por unos cuantos milagros que pusieron a todo el mundo a rezarle. Desde entonces, la romería del 14 de mayo se celebra a lo grande, con todos los vecinos y habitantes de la comarca de Vitigudino.
Cada año, el 14 de mayo, una multitud de personas se acerca a la reja que guarda la piedra blanca, esperando un poco de la magia que se desprendía de ese pedazo de roca que salió de la peana de Nuestra Señora de los Ángeles. Desde Las Arribes hasta la Sierra, y más allá del Duero, los milagros del polvo blanco fueron ganándose un lugar en el corazón de la gente.
Desde que en 1721 apareció ese tesoro en la peana de granito, la Virgen del Castillo ha sido el orgullo de toda La Ribera, confirmando la leyenda de los sueños de un pastor, que marcó el lugar de su descanso durante siete siglos entre las ruinas del castillo para evitar que cayera en manos musulmanas. Desde entonces, los milagros han formado parte de la historia de esta fiesta, a la que acuden fieles fervorosos buscando el favor de la Virgen ‘chica’, quien, aunque pequeña en tamaño, es la más venerada en toda La Ribera.